sábado, 3 de julio de 2010

Brasil: Crónica de una muerte inesperada

Antonio Lucas "Lobo" / Cieza.

Brasil está en la final.

Ese era el titular amarillo que tenía preparado para este artículo al término de la primera parte de su encuentro de ayer tarde. No obstante, Holanda ha impuesto que mis palabras se tornen de color naranja.

Brasil-Holanda… cayó el mejor equipo. El favorito en las casas de apuestas dice adiós al Mundial ante una Holanda que derrochó esfuerzo en la segunda parte y tuvo a la suerte como aliada en forma de acierto, imprescindible a estas alturas del cotarro.

La selección de Dunga cuajó una gran primera parte en la que pudo sentenciar el encuentro, sin mostrar fisura alguna en su retaguardia y con electricidad pura en la punta de ataque. Robinho, con fuego en sus botas, marcó el 1-0 ante la pasividad de la zaga contraria y fue el mejor de los primeros 45 minutos, y probablemente el mejor Robinho de los últimos dos años. En la segunda parte simplemente desapareció, como muchos de sus compañeros. El descanso llegó y Brasil se frotaba las manos, mientras yo intentaba imaginar en rojo cómo romper el muro del emperador Julio César en una hipotética finalísima, menos mal que imaginar sale gratis.

Al comienzo de la segunda parte, los holandeses tiraron de la quinta marcha por primera vez en lo que va de campeonato, eso les hizo ganar metros y posesión. Sin embargo, Brasil parecía invencible, intocable, hasta que un balón aéreo de un bendecido Sneijder provocó el error conjunto del guardameta carioca (“Este gol será muy doloroso para mí siempre”, confesó Julio César entre lágrimas) y Felipe Melo, este último introdujo el balón en propia puerta. Ahí comenzó otro partido. Los cariocas empequeñecieron, los tulipanes se multiplicaron y dos futbolistas dejaron su impronta en el terreno de juego: Robben, enjaulado en el primer tiempo, acabó haciendo su agosto particular, desató sobre el césped su mundo feliz de regates cortos y velocidad vertiginosa, pidió el balón como un rey pide su cetro. Él atraía toda la atención e ira brasileña mientras Sneijder dirigía con pulso firme a la versión descafeinada de la Naranja Mecánica.

Todo se puso definitivamente de cara para Holanda cuando tras la expulsión del rufián Melo llegó el segundo gol, obra de Wesley Sneijder. Brasil estaba KO.

Dunga (que deja la selección) fue incapaz de solucionar desde fuera lo que se estaba perdiendo dentro. Tardó mucho en quitar a Bastos, que tenía la amenaza de la expulsión rondándole cual tuno ebrio a la fémina de turno, la pifió con la sustitución de su hombre-gol (L. Fabiano) cuando aún quedaban minutos para deshacer entuertos y no se atrevió a dar entrada a un jugador ofensivo y prescindir de uno de corte rácano, digamos Batista por Juan, cuando las entrañas de una selección ganadora por designio genético así lo clamaban.

Brasil ha sido un equipo impecable todo el campeonato, excepto cuando ha tenido que remar en contra, cosa que sucedió por primera vez ayer. Cuánto importa en el deporte el estado de ánimo, no deja de ser sorprendente cómo tal variable define, por ejemplo, quienes llegan antes a los balones divididos y quienes midiendo 1,70 rematan un balón dentro del área entre torres atléticas. La canarinha resultó un conjunto preso de la ansiedad y nunca hombres sin confianza ganaron nada en este juego.

Holanda encontró petróleo en las jugadas a balón parado y el hasta ahora todocampeón Sneijder supo tomar la batuta de un equipo que no merece llamarse la nueva Naranja Mecánica pero que ya es semifinalista del mundial. Para mi gusto, muchos gajos y poco zumo, la selección de Marwijk no define en forma de goles todo su potencial ofensivo y calidad individual y su defensa no es de las mejores, eso sí, obtiene el máximo beneficio con su juego, por ahora…

6 comentarios:

Anónimo dijo...

He de aclarar que ayer vi sólo la última parte del partido, pero he visto a Brasil durante el Mundial y por esoo opino..jejej

Brasil para mí sólo tenía el nombre. Puede parecer un comenatario oportunista, de hecho lo es, pero esta selección estaba a años luz de otras selecciones cariocas. Brasil siempre ha estado formada por jugadores que era auténticos cracks....los de esta selección, a mi juicio, excepto Kaká,Lucio y Maicon, son segundones. Sino comparen a Robinho con Ronaldinho, a Luis Fabiano con Ronaldo...a los Elano,Felipe Melo,etc...con los Mauro Silva,el propio Dunga,Rivaldo...y lo mejor de todo, ver a Dani Alves de organizador contra Chile(ayer me imagino que fue igual, pero sólo vi la última media hora y no me fije en ese detalle)...que quizá no lo haya hecho mal...pero este recurso dice mucho de una selección como Brasil...me hubiera gustado ver la cara de Xavi viendo a la competencia en el puesto...

Vamos, que estoy con Cruyff, verguenza de equipo la canarinha.

A.Vilas

Raúl M. dijo...

Total y absolutamente de acuerdo contigo.

Lo que dices, mirar en las fotos laterales... Romario, Ronaldo, Ronaldinho... Esta 'canarinha' parece de broma.

LOBO dijo...

Sí, estoy de acuerd con vosotros, esta "canarinha" es la peor q hemos visto, especialmente comparando hombre a hombre. Pero era un equipo muy dificil de batir, eso me lo reconoceréis... si holanda no llega a encontrarse con el empate Brasil ya estaría en la final, maracanazos aparte.
Lástima q ya no podamos ser nosotros los q venzamos al pentacampeón, me huebiera encantado pintarles la cara. Mucho...

Anónimo dijo...

Yo sabia que iba a pasar esto. Brasil no tiene equipo!!!!!!!!

Abel Ortega

Anónimo dijo...

Pues sí Lobo...yo deseaba darle un repaso a los brasileños, una final contra Brasil hubiese sido de película, ser campeón contra ellos te hacer ser más grande aún...pero bueno...espero que nos desquitemos contra otra de las grandes...qué ganas le tengo a Argentina dios míooo...A ganarrr hoyy!!!!

A.Vilas

Anónimo dijo...

Eso que ha hecho Alemania con Argentina es lo que yo deseabaa...bueno por lo menos me queda la satisfacción de que alguien le ha dao un repasoo a los argentinoss...

A.Vilas

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